Mucho tiempo ha transcurrido desde que les contaba en líneas inferiores la realización de mis objetivos y cómo mi ansiada meta de reducir mi peso se iba cumpliendo. ¿Que cómo estoy ahora? No he oído bien, ejem, ¿que cómo estoy ahora? MUY MAL!!! Resumo la situación: Conseguí bajar mucho peso y pasé de los 124 kg iniciales a unos 70 kg. (no está nada mal!) pero hace mas ó menos año y medio empecé a comer de forma casi compulsiva y entré en una espiral en la que me costó salir. Iba ganando peso y me iba sintiendo cada vez más insatisfecha por lo que a su vez, comía más y más para sentir placer y así calmar mi desdicha. Total, que he conseguido recuperar en año y medio todos los kg que perdí e incluso cogí alguno mas. Hace unas semanas subí a mi vieja amiga (la báscula, -que hasta tenía telarañas y todo-) y tachan tachan... 129 kg (y aun así, fue buena al no mostrar un "3" como decena pues habría sido aun más traumático).
En todo este tiempo quise seguir escribiendo, pero no me animé a hacerlo, quizás por no querer plasmar por escrito y constatar para la posteridad mi INCOMPETENCIA, mi FRACASO, mi MEDIOCRIDAD y sobre todo, porque "sin comerlo ni beberlo" (tiene chiste la expresión) me encontré sumida de nuevo en el mundo de las tinieblas donde lo tenebroso y oscuro parecía no tener fin, camino que recorrí yo sola y que me llevó a la tristeza, a la desilusión y a la apatía mas angustiosa.
Seguramente con la entrada de la primavera y la aparición de los primeros rayos de sol ó quizás porque le he dado definitivamente la patada a "Mr. Bean", he decidido asomarme de nuevo por aquí cual seta tras la lluvia. El caso es que quiero pedir disculpas (a mi misma, a quien si no) por que NO ME ATREVÍ A DAR LA CARA...
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